¿Realmente era amor ?

Al igual que a muchos amigos aficionados al cine, coincido en un montón de críticas a "Love Actually" . Y eso que en su momento salí del cine, tras ver la película, en un estado casi de euforia. Deseando en ese mismo momento enamorarme de alguien. Pero tras un par de visionados en DVD (bastante satisfactorios, con todo), la mirada apasionada se torna mas bien crítica. Y así, uno ve que, frente a episodios de una contención y dramatismo admirable, como los protagonizados ppor Emma Thompson y Alan Rickman, conviven otros del mas puro pasteleo (La boda, la declaración de amor en el restaurante). Y como secuencias que podían haber sido míticas, como la escena de Keira Knightley ante el video de su boda, se estropean ante una cierta torpeza del director, que se empeña en decirnos con palabras todo lo que las imagenes nos han dicho ya.

Pero pese a todo, sigo considerando esa escena, la del vídeo, como una de las declaraciones de amor más bonitas que he visto jamás en el cine. Será por experiencia propia, pero los amores no declarados y , menos aún, correspondidos, me parecen... la expresión mas bonita de lo que es el amor. Por que es maravilloso saber que la persona con la que piensas todo el día y con la que desearías estar todo el tiempo siente lo mismo que tú. Pero el dolor que sientes cuando sabes que esto no es, ni será, posible, es como llevar un alfiler clavado en el corazón a cada instante.

Eso por no hablar de las escenas eliminadas que incluye el DVD. Una colección de pequeñas joyas, algunas de las cuales podrían funcionar como cortometraje. Como la protagonizada por el personaje de Liam Neeson y su hijo, y gracias a la cual conocí una de las canciones que más me han emocionado de los 60 y 70: Johanna, de Scott Walker, un cantante semidesconocido en españa, increíble mezcla de crooner romántico y chansonneur existencialista francés

No se por qué, cada vez que la oigo, me acuerdo de cierta persona.